Convivir con la naturaleza (foto de Jaime Cristóbal López)

lunes, 22 de octubre de 2012



Insomnio deriva en Alzheimer


Dormir sin descansar, somnolencia durante todo el día, e ingerir medicamentos para dormir, son síntomas que pueden derivar en el diagnostico de Alzheimer, en el futuro.
De acuerdo con los investigadores, el insomnio, dormir con la sensación de no haber descansado, o dormir perturbado, podría causar Alzheimer conforme se envejezca. Los resultados de los diferentes estudios fueron presentados en la reunión anual de la Sociedad para la Neurociencia en Nuevo Orleans.
Los pacientes que tienen Alzheimer dicen tener cambios en el sueño durante las primeras etapas de la enfermedad. Por ejemplo, las siestas diurnas de las personas sanas duran alrededor de 20 minutos, mientras que las personas con Alzheimer podrían ser de hasta 3 horas.
A raíz de esto, Roxanne Sterniczuk, neurofisióloga de la Universidad de Dalhousie, quería saber si era posible predecir qué tanta probabilidad hay de que una persona desarrolle la enfermedad.
Sterniczuk y su equipo analizaron datos de 14 mil 600 personas sanas. Los datos se obtuvieron de una encuesta de salud, envejecimiento y jubilación en Europa (SHARE, por sus siglas en inglés).
Los investigadores concluyeron que las personas que tienen problemas para dormir, que se sienten cansadas todo el día y que toman medicinas para el sueño, son más propensos a ser diagnosticadas con Alzheimer en los próximos años.
Sterniczuk asegura que dormir mucho en el día es el rasgo más importante. Antes de cualquier enfermedad, siempre se dan cambios en los ciclos del sueño.
Los trastornos del sueño pueden ser un indicador de los cambios cerebrales que ocurren cuando se está desarrollando Alzheimer, por lo que pueden contribuir a la progresión de la enfermedad.
Sterniczuk está investigando si los cambios en los patrones del sueño están directamente relacionados con alteraciones en la actividad de los genes que se encuentran en el núcleo supraquiasmático, región del cerebro encargada de controlar los ritmos circadianos, las variables biológicas de nuestro organismo que regulan el ciclo del sueño y donde se puede desarrollar la enfermedad neurodegenerativa.
Lo más importante es poder encontrar formas funcionales para poder diagnosticar la enfermedad a tiempo para evitar que las personas la desarrollen.


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