Nutrición: Una asignatura pendiente en la educación secundaria

“Un adolecente gordito es un adolecente sano”, hemos escuchado esta frase más de una vez, y es que hace algunos años, aún se creía que el estar “gordito” era sinónimo de salud, de felicidad, de bienestar; ahora valdría la pena hacer otra pregunta: un adolecente gordito, ¿es un adolecente feliz?

Recientemente se dio a conocer que México ha obtenido el alarmante primer lugar en obesidad infantil, pero ¿quiénes son los verdaderos culpables? ¿los adolecentes?, ¿los padres? ¿los medios de comunicación?. Valdría la pena retomar algunos puntos importantes, especialmente para comprender que todos estamos involucrados en la alimentación de los adolecentes, desde el núcleo familiar hasta el personal de la institución donde el adolecente pasa una parte importante del día y donde adquiere la educación y los valores que determinarán no sólo su desarrollo mental y la inserción en una sociedad, sino también su desarrollo físico que es determinante en su estado de salud.

Nosotros como docentes podemos observar claramente que en la actualidad en la mayoría de la población infantil en nuestras escuelas es palpable el desarrollo de una serie de malos hábitos alimenticios: como el aumento en el consumo de comida chatarra y procesada, mientras que la comida casera y los alimentos de origen natural parecen estar siendo erradicados de nuestras mesas. Al parecer, las nuevas generaciones no está al tanto de estas opciones alimenticias, que podrían ayudarles a lograr un mejor desempeño, tanto en la escuela como en su vida diaria.

Y es que los problemas nutricionales no solamente abarcan el sobrepeso y la obesidad, por el contrario, las afecciones nutricionales van desde el exceso hasta la deficiencia, tal es el caso de la desnutrición y la anemia, problemas graves de salud que están también presentes en nuestros adolecentes.

Por otro lado, el aumento de casos de personas con trastornos como anorexia o bulimia también es algo preocupante. En un principio parecía afectar solamente a adolescentes, pero recientes estudios reflejan que cada vez son más los niños de edades tempranas que se preocupan por no ganar unos kilos de más.

 Con este ensayo, he pretendido ofrecer un panorama general sobre la problemática en el tema de la alimentación en adolecentes de edad escolar, así como las  alternativas con las que los profesores podemos contar para  inculcar en su alumnado buenos y correctos hábitos alimenticios e higiénicos.

La alimentación en la educación secundaria

En la actualidad, el tema de la alimentación es tratado por la escuela tradicional a través de las ciencias naturales desde un enfoque higienista y dietista, bajo el estudio académico fisiológico y apoyado en textos escolares.

Sin embargo, este tema también puede ser visto a través de enfoques globalizadores, mediante un enfoque funcional, con proyección social para potenciar la calidad de vida de los alumnos, apoyada en propuestas de investigación.

 Al menos 40 por ciento de los adolecentes que cursan primero de secundaria están en riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y diabetes por la obesidad y el sobrepeso que padecen.

Las instituciones de salud mantienen programas para combatir los problemas relacionados con la nutrición infantil, sin embargo es importante considerar que nosotros como docentes jugamos un papel primordial.

Podemos observar día a día en la práctica docente los hábitos alimentarios que tienen los adolecentes, y muchas veces es frustrante el ver los errores que cometen los mismos padres y los adolecentes y ver también todas las consecuencias que esto representa. Es por este motivo que considero que los profesores de educación secundaria debemos de tener más armas para ayudar a educar a los adolecentes en este rubro tan importante, qué otra cosa puede ser más importante que la salud misma? Porque sabemos que de la salud, de la alimentación se desglosa todo lo demás.

Un adolecente no puede estudiar, no puede aprovechar las clases ni un lugar en su escuela si no está bien alimentado, y peor aún, si tiene problemas de salud debido a la alimentación, no es nada nuevo que una buena alimentación es la base de la salud y especialmente del aprovechamiento escolar, es por eso que yo considero que es muy importante tener presente la nutrición en las escuelas secundarias.

La triste realidad es que se ha dejado de lado una materia de tanta importancia como la alimentación "Somos lo que comemos", se suele decir... Y sin embargo, nadie nos enseña cómo debemos comer, cuáles serán los alimentos que nos ayudarán a vivir mejor y de qué modo nos podemos organizar para que esta función vital que efectuamos varias veces al día sea más apropiada desde un punto de vista nutricional.

Por otra parte, si existe ya una asignatura que en cierto modo puede considerarse complementaria desde el punto de vista de la salud, como es la educación física, debería parecernos inaplazable dotar al programa educativo del otro pilar sobre el que se sustenta el bienestar de las personas: su alimentación.

A estas alturas ya no debería parecer disparatada la inclusión en los programas educativos de enseñanzas relacionadas con la alimentación. ¿Es realista demandar que se implante una asignatura fija de alimentación a lo largo de todo el recorrido escolar? ¿Significa pedir un imposible? Tal vez, pero de momento, yo me permito soñar con ese ideal y poner lo que esté de mi parte para mejorar en este rubro, pues considero que nosotros tenemos una responsabilidad muy grande debido a nuestra profesión y nuestro contacto tan directo con los adolecentes.
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