Aunque los continentes dan la sensación de "tierra firme", en realidad son
bloques gigantes de roca relativamente ligera, que flotan alrededor de la
superficie terrestre.
Gracias a la utilización de satélites de precisión se ha descubierto que
Europa, año a año, se aleja unos 30 milímetros de las Américas y que además el
Océano Pacífico se expande cuatro veces más rápido. El cambio en la apariencia
de la Tierra es inevitable.
Los geólogos creen que el resultado de estos movimientos en cámara lenta será
la formación de un súper continente gigante durante los próximos 250 millones de
años.
Es sabido que la existencia de estos súper continentes se ha dado en muchas
oportunidades durante la vida del planeta, pero su apariencia depende de muchos
factores, tales como la velocidad y dirección de estas mega colisiones.
Con los instrumentos existentes en la actualidad, el profesor Chris Scotese,
de la Universidad de Texas, en Arlington, ha esbozado simulaciones
computarizadas que sugieren que África, Europa y las Américas, dentro de 250
millones de años, se unirán alrededor de la línea del Ecuador, lo que producirá
un enorme estanque de agua entre ellos y, por ende, el nacimiento de un nuevo
mar.
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